El Mass Driver es un exótico sistema de transporte, derivado de los aceleradores de partículas, para cargas que no sean frágiles.

El cargamento se coloca dentro de una cápsula especial (la "bala") que es acelerada dentro del cañón mediante potentes campos electromagnéticos, hasta lograr que su velocidad a la salida del cañón sea lo bastante alta como para permitirle llegar al espacio.

La atmósfera de la Tierra frenaría o destruiría la cápsula, por lo que aquí este sistema sólo se puede usar para acelerar aeronaves especiales en su despegue. Pero el Mass Driver con capacidad de poner cargas en órbita sí es viable para lanzamientos efectuados desde la superficie de la Luna, debido a la inexistencia de atmósfera en ésta y a su baja gravedad.


La baza más importante de este cañón electromagnético es que permitiría enviar cargamentos al espacio a un coste muy inferior del que tendría su transporte mediante astronaves convencionales. Resultaría particularmente útil para, por ejemplo, enviar minerales y otras materias primas extraídas de la Luna a una órbita lunar en la que se estuviera construyendo una gigantesca estación orbital.

Cuanto mayor fuese la aceleración imprimida por el cañón a la cápsula, menor sería la longitud que debería tener. En los experimentos con prototipos de tamaño pequeño en el laboratorio, se ha llegado a la conclusión de que un cañón lunar de 160 metros de largo bastaría para poner en órbita las cargas.



Texto: Jorge Munnshe
En las imágenes superiores, prototipos de vehículos aéreos para ser acelerados durante el despegue por un sistema análogo al Mass Driver pero de menor potencia. Fotos: NASA-MSFC.
En la imagen inferior, recreación artística de base lunar equipada con un Mass Driver (el largo tubo que se extiende a gran distancia. Foto: NASA.