REALIDAD
VIRTUALLa Realidad Virtual consiste en la recreación ilusoria de un entorno, engañando los más importantes sentidos humanos.
El casco que el usuario se coloca le proporciona la visión del universo virtual según orienta la cabeza.
Los guantes le permiten agarrar y manipular objetos de ese mundo ficticio. De esta manera, en algunos aspectos puede cruzar el umbral de la pantalla del ordenador y situarse en el otro lado.
En el interior de la mente humana, realidad e imaginación siempre han existido, pero aisladas la una de la otra por una barrera infranqueable, proporcionada por los cinco sentidos que alimentan de información al cerebro. Aunque los trastornos mentales y las sustancias alucinógenas engañan al cerebro con falsas percepciones de los sentidos, no es posible con ellos construir escenarios e historias a gusto del usuario como si de películas se tratase.
En cambio, la Realidad Virtual, que engaña cada vez con
más perfección
los sentidos, sí permite tal cosa. Un viejo anhelo humano, soñar
despierto lo que se desee, podría estar a nuestro alcance fácil en un
futuro muy cercano.Más allá de lo lúdico, la Realidad Virtual cuenta con interesantes aplicaciones científicas, entre ellas el entrenamiento de astronautas, por citar un ejemplo pionero.
La Realidad Virtual es otro buen ejemplo de tecnología de rápida eclosión. Cuando, a principios de la década de 1990, estuve en contacto con grupos de investigación y las empresas pioneras del momento para escribir el primero de mis artículos sobre el tema, la Realidad Virtual les parecía más ciencia-ficción que realidad a muchas personas.
Texto: Jorge Munnshe
Las dos imágenes superiores muestran al astronauta Jeffrey Hoffman utilizando un sistema de Realidad Virtual de la NASA. Foto: NASA.
En la imagen inferior, Jeffrey Hoffman (izquierda) con Jorge Munnshe.