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Una Bella Nebulosa Planetaria
28 de Agosto de 2001.
 Una detallada imagen obtenida por el telescopio espacial Hubble ha permitido a astrónomos españoles y estadounidenses detectar estructuras complejas de gas en una nebulosa planetaria, ondas de choque supersónicas que se extienden a través del espacio.
Es la primera vez que dichas estructuras son visibles, hasta ahora sólo predichas por la teoría. Se producen en las cercanías de estrellas como nuestro Sol, que han llegado al final de sus días y que han empezado a expeler gran cantidad de material de sus atmósferas en gigantescas explosiones que dan forma a lo que denominamos "nebulosas planetarias".
Este proceso es el que se está desencadenando en OH231.8+4.2, también conocida como "Nebulosa Calabaza" o "Nebulosa del Huevo Podrido" (debido a la abundante presencia de compuestos del azufre, que herirían nuestra capacidad olfativa si pudiéramos usarla en el espacio).
La nebulosa se compone de gas expulsado por la estrella central que se ha visto después acelerado en direcciones opuestas. El gas (amarillento, ver imagen) ha alcanzando altísimas velocidades de hasta 1,5 millones de km/h.
Los astrónomos españoles y estadounidenses han usado el Hubble para estudiar cómo el gas golpea contra el material que rodea a la estrella (zona azul). Debido a la alta velocidad del gas, se forman frentes de choque durante el impacto y ello calienta el resto del material.
Aunque los cálculos teóricos habían predicho la existencia y la estructura exacta de estas ondas de choque durante algún tiempo, hasta ahora no teníamos pruebas visuales claras del fenómeno. La imagen obtenida por el Hubble, en cambio, nos ofrece una visión de éste con gran detalle. Utilizando filtros para recibir sólo la luz del hidrógeno ionizado y de los átomos de nitrógeno, los astrónomos han podido distinguir las partes más calientes del gas afectado por los violentos choques. Se ha podido así constatar una compleja forma de doble burbuja.
Según Valentín Bujarral, del Observatorio Astronómico Nacional, es la primera vez que tenemos fotografías de suficiente calidad como para hacer comparativas con los modelos de ordenador.
Los astrónomos creen que la mayor parte del flujo de gas observable hoy en día procede de una súbita aceleración producida hace unos 800 años. Pasarán otros mil años antes de que la Nebulosa de la Calabaza se convierta en una nebulosa planetaria plenamente desarrollada. El objeto tiene ahora un diámetro máximo de 1,4 años luz y se encuentra en un cúmulo estelar abierto a unos 5.000 años luz de la Tierra.
Información adicional en:
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