Home / Ultimas Noticias
Archivo Noticias de la Ciencia y la
Tecnología.
Archivo Noticias del Espacio
Contacto
Suscripciones (público/email)
Boletín Noticias de la Ciencia y la
Tecnología
Boletín Noticias del Espacio
Boletín Noticias de la Ciencia y la
Tecnología Plus
Suscripciones (servicios a
medios)
Reproducción de contenidos en medios
comerciales
|
Recuerda:
suscríbete a nuestros boletines gratuitos y recibe cómoda y
semanalmente las noticias en tu dirección electrónica.
Biología
Un Método Más Eficaz de Limpiar Fruta y Perdura
28 de Mayo de 2008.
Lavar
las frutas y las verduras antes de comerlas reduce el riesgo de
intoxicación alimentaria y esos molestos episodios de vómito y diarrea.
Pero según una nueva investigación, solamente lavarlos, aunque se
empleen desinfectantes basados en el cloro, puede no ser suficiente en
algunos casos, mientras que un tratamiento alternativo que ahora se está
ensayando sí puede hacer el trabajos.
Menéame
Los estudios muestran que ciertos microbios específicos causantes de
enfermedades son verdaderos Houdinis a la hora de evadirse de tales
compuestos desinfectantes. Esas bacterias pueden encontrar refugio en el
interior de las hojas de lechugas, espinacas y otras verduras y frutas,
donde los tratamientos superficiales no pueden alcanzarlas.
Por si fuera poco, estos microbios pueden organizarse de manera
hermética en comunidades estrechamente apretadas llamadas biopelículas,
que cubren a frutos y verduras, y que protegen a las bacterias de sufrir
daños. Este tipo de comunidad bacteriana puede albergar múltiples
versiones de bacterias infecciosas causantes de enfermedades, como la
Salmonella y la Escherichia coli.
Ahora, un nuevo hallazgo hecho por científicos del Departamento de
Agricultura de Estados Unidos (USDA, por sus siglas en inglés) sugiere
que la irradiación, un tratamiento especial para alimentos que está
siendo revisado por la FDA (la administración estadounidense encargada
de velar por la seguridad alimentaria y farmacológica), puede matar de
manera efectiva a los patógenos que se hayan internado más adentro de
hasta donde llega la acción de los agentes químicos convencionales.
La irradiación expone a los alimentos a fuentes de rayos electrónicos,
creando cargas positivas y negativas. Estas cargas rompen el material
genético de las células vivas, inactivando a los parásitos y destruyendo
a los patógenos e insectos en los alimentos, incluyendo a la E. coli y a
la Salmonella.
El empleo de esta técnica, con las debidas precauciones para evitar
efectos secundarios, sobre los frutos y vegetales frescos puede
constituir una forma eficaz de reducir el número de casos de
enfermedades transmitidas a través de la comida que se registran cada
año, según cree Brendan A. Niemira, un microbiólogo que trabaja con el
Servicio de Investigaciones Agrícolas del USDA, en Wyndmoor,
Pensilvania, quien dirigió el estudio.
Niemira y sus colegas estudiaron cómo las concentraciones de las
bacterias internadas en secciones interiores de los alimentos respondían
a diferentes tratamientos.
El estudio mostró que el lavado con sólo agua no era efectivo para
reducir los niveles de los patógenos afianzados en las espinacas o en
las lechugas. El tratamiento químico, una solución de hipoclorito
sódico, no produjo una significativa reducción de las células de E. coli
en hojas de espinacas, y alcanzó menos del 90 por ciento de reducción en
las muestras de lechuga.
La radiación ionizante, en cambio, redujo significativamente las
poblaciones de patógenos tanto en las hojas de espinaca como en las de
lechuga. El nivel de eficacia dependía de la dosis aplicada, con
reducciones que llegaron al 99,99 por ciento en la lechuga, y al 99,90
por ciento en la espinaca a las dosis más altas probadas.
Los investigadores realizaron a continuación experimentos con
biopelículas para comprobar hasta qué punto las diferentes cepas de
Salmonella y de E. coli, refugiadas dentro de las biopelículas,
resistían a la irradiación.
Las biopelículas que resguardaban a las Salmonella tendían a ser
destruidas más fácilmente con la irradiación, mientras que las de la E.
coli eran un poco más resistentes.
Información adicional en:
|