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Zoología
Cómo las Ballenas Pudieron
Desarrollar Su Biosonar
17 de
Octubre de 2007.
Tras
las leyendas de los marineros sobre batallas aterradoras entre
cachalotes y calamares gigantes, yace un profundo interrogante sobre la
evolución: ¿Cómo desarrollaron las ballenas los sonares submarinos
necesarios para perseguir y atrapar a los calamares en las oscuras
profundidades del mar? Una investigación parece haber desvelado el
enigma.
Menéame
Dos biólogos especializados en evolución, de la Universidad de
California en Berkeley, explican que las ballenas consiguieron sus
sonares de la misma manera en que los murciélagos desarrollaron los
suyos para perseguir a los insectos que volaban en la oscuridad. Las
ballenas dentadas desarrollaron inicialmente sus sonares para perseguir
a calamares nadando en la superficie durante la noche.
Debido a que los calamares migran a aguas más profundas y oscuras
durante el día, las ballenas dentadas finalmente perfeccionaron un
sistema muy potente de ecolocalización que les permite seguir al calamar
en su descenso hacia ese hábitat, "el frigorífico de las profundidades,
donde el alimento está disponible, en cualquier momento del día o de la
noche durante toda la semana", como lo describe el biólogo evolutivo
David Lindberg, quien ha llevado a cabo el estudio junto con Nick
Pyenson.
Todas las ballenas dentadas emplean la ecolocalización. Muchas especies
bucean más allá de los 200 metros de profundidad, donde la luz solar se
extingue dejando paso a la oscuridad. La mayor de las ballenas dentadas,
el cachalote, crece hasta 18 metros de largo y bucea hasta 3.000 metros
de profundidad en su búsqueda de calamares.
Las primeras ballenas entraron en el mar procedentes de la tierra unos
45 millones de años atrás, y, aparentemente, no poseían ecolocalización.
Los primeros indicios de esta capacidad aparecieron hace unos 32
millones de años, una época, en la que, presumiblemente, las ballenas ya
se habían esparcido por todos los océanos.
Pero, ¿cómo supieron las ballenas que existía una gran fuente de
alimento en las oscuras profundidades? ¿Cuáles fueron los pasos
intermedios evolutivos que las llevaron a buscar comida ahí abajo?
En la época en la que las ballenas desarrollaron los biosonares, los
nautiloides eran muy abundantes en los océanos. Lindberg y Pyenson
sugieren que las ballenas primero se las arreglaron para seguir a estos
animales de concha dura en la superficie durante la noche, haciendo
rebotar sobre éstos los sonidos que ellas emitían. Esto les daba una
ventaja sobre las ballenas que sólo se valían de la luz de la luna o de
las estrellas. Esto habría predispuesto a las ballenas a seguir a los
cefalópodos en su migración diurna hacia las profundidades oscuras.
Al pasar los milenios, las especies de cefalópodos en general, y
específicamente las especies de cefalópodos con conchas, disminuyeron al
aumentar las especies de ballenas. Esto fue causado posiblemente por la
depredación llevada a cabo por las ballenas. Luego, hace unos 10
millones de años, las ballenas con su depredación al parecer ahuyentaron
a los nautiloides de mar abierto hacia los arrecifes protegidos. El
descenso en la diversidad de nautiloides obligaría a las ballenas a
perfeccionar su sonar para cazar calamares, de cuerpo blando, durante su
migración hacia las profundidades.
Las ballenas no necesitaban un sistema de sonar muy sofisticado para
seguir a los nautiloides, gracias a la fácil detección de las conchas
duras de esas criaturas. Fue sólo después cuando desarrollaron un
sistema complejo con una mejor resolución, para capturar a los
calamares, de cuerpo blando.
Las ballenas y los murciélagos son ejemplos notables de una evolución
convergente para sacar provecho de fuentes no explotadas de alimento.
Información adicional en:
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