Home / Ultimas Noticias
Archivo Noticias de la Ciencia y la
Tecnología.
Archivo Noticias del Espacio
Contacto
Suscripciones (público/email)
Boletín Noticias de la Ciencia y la
Tecnología
Boletín Noticias del Espacio
Boletín Noticias de la Ciencia y la
Tecnología Plus
Suscripciones (servicios a
medios)
Reproducción de contenidos en medios
comerciales
|
Recuerda:
suscríbete a nuestros boletines gratuitos y recibe cómoda y
semanalmente las noticias en tu dirección electrónica. Bioquímica.
Formación de Hueso en el Laboratorio
14 de Octubre de 2002.
Un nuevo estudio realizado por investigadores de la Rice University indica que los bioingenieros que están intentando hacer crecer tejidos óseos en el laboratorio podrán crear por fin la estimulación mecánica necesaria para que el hueso crezca correctamente fuera del cuerpo.
Uno de los grandes retos que los ingenieros de tejidos afrontan al intentar formar hueso en el laboratorio es precisamente la recreación de las condiciones que suceden en el interior del organismo. La receta para hacer crecer huesos saludables no sólo incluye una mezcla biológica precisa (células óseas llamadas "osteoblastos" y varios factores de crecimiento que estos últimos utilizan para construir la matriz mineralizada de los huesos), sino también una estimulación mecánica adecuada. Los astronautas cuyos huesos se convierten en frágiles después de pasar meses en órbita son un testamento de la importancia que la tensión mecánica juega en el crecimiento del hueso. En el espacio, en ingravidez, los esqueletos no están sujetos a las tensiones diarias de la gravedad.
En Rice, los investigadores colocaron osteoblastos de rata, derivados de médula ósea, en el interior de unas cámaras de plexiglás de un centímetro de diámetro que contenían una malla de delgadas fibras de titanio. Las muestras se cubrieron con un medio de crecimiento líquido (un baño de sustancias que promueven el crecimiento óseo) y fueron selladas en una incubadora. Después de dejar que los cultivos permanecieran así toda una noche, dando tiempo a que las células se unieran por sí solas a la malla, los ingenieros empezaron a bombear un medio de crecimiento a través de los cultivos durante 16 días. Un grupo fue expuesto a una gama de tres ritmos de flujo diferentes, proporcionando estimulación mecánica, y otro grupo de cultivos creció en un baño inmóvil.
Ya se había utilizado el flujo de un fluido para estimular el crecimiento óseo con anterioridad, pero nadie había observado sus efectos en cultivos tridimensionales que hayan estado en estimulación continua durante varios días. Los resultados indican que incluso el ritmo más bajo de estimulación produce un incremento significativo en la formación del hueso mineralizado. De hecho, dicho hueso resulta ser más grueso y estar mejor formado, de manera similar a uno natural.
Son necesarios más estudios para determinar el ritmo de flujo exacto necesario para producir una cantidad óptima de matriz de hueso con la estructura tridimensional adecuada. Aún pasarán años antes de que un paciente que ha sufrido una pérdida de hueso por cáncer o herida, pueda ser tratado con esta tecnología.
Información adicional en:
|