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El Poder de la DTF
14 de Agosto de 2001.
 La National Science Foundation ha otorgado varios contratos para la construcción de la Distributed Terascale Facility (DTF), la que promete va a ser la infraestructura informática más potente dedicada a la investigación científica en el mundo, con una velocidad de miles de billones de cálculos por segundo.
Su poder de computación exacto será de 13,6 teraflops, con una capacidad de almacenamiento de 450 terabytes. En su diseño y construcción participarán el National Center for Supercomputing Applications (NCSA) de la University of Illinois en Urbana-Champaign, el San Diego Supercomputer Center (SDSC, ver imagen) de la University of California en San Diego, el Argonne National Laboratory, y el California Institute of Technology. Las empresas que colaborarán son IBM, Intel Corporation, Qwest Communications, Myricom, Sun Microsystems y Oracle Corporation.
Con un coste de unos 53 millones de dólares, la DTF supondrá la compra de varios grupos de computación Linux distribuidos en los cuatro centros, totalizando 11,6 teraflops, a los cuales se sumarán dos grupos más de 1 teraflop cada uno ya disponibles en el NCSA. Cuando esté listo, se convertirá en el sistema de computación distribuida más potente de la historia. Además de ser el supercomputador no clasificado más rápido, el hardware y el software de la DTF incluirá redes de velocidad ultra-rápida, medios de visualización de alta resolución, etc. Todos estos componentes quedarán integrados en una infraestructura denominada "TeraGrid".
Científicos e investigadores de todo el país podrán acceder a la red para resolver sus problemas avanzados de computación. Se espera, por ejemplo, que se produzcan importantes descubrimientos en el campo de la biología y la genómica, la astronomía, etc.
La TeraGrid reconoce la importancia creciente de la computación orientada a los datos, de la conexión de los archivos de información, los instrumentos remotos y la visualización. Por eso, será una herramienta científica mucho más poderosa y flexible que cualquier supercomputador actual.
La DTF consistirá principalmente en varios servidores IBM agrupados, basados en la familia de procesadores Itanium de Intel, interconectados con el sistema Myrinet de Myricom. Los grupos quedarán enlazados por redes de fibra óptica que inicialmente operarán a una velocidad de 40 gigabits por segundo y que más tarde duplicarán esta cifra. Se espera que la DTF esté lista dentro de tres años.
Información adicional en:
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