Home / Ultimas Noticias
Archivo Noticias de la Ciencia y la
Tecnología.
Archivo Noticias del Espacio
Contacto
Suscripciones (público/email)
Boletín Noticias de la Ciencia y la
Tecnología
Boletín Noticias del Espacio
Boletín Noticias de la Ciencia y la
Tecnología Plus
Suscripciones (servicios a
medios)
Reproducción de contenidos en medios
comerciales
|
Recuerda:
suscríbete a nuestros boletines gratuitos y recibe cómoda y
semanalmente las noticias en tu dirección electrónica.
Paleontología
La Gran Robustez de las Mandíbulas de los Primeros
Humanos
9 de Marzo de 2009.
La
recomendación que los adultos dan a los niños pequeños de no usar los
dientes como herramienta para abrir algo duro, es acertada y sensata.
Los cráneos humanos tienen mandíbulas y dientes pequeños que no están
bien preparados para morder con fuerza objetos duros. Sin embargo, no
sucedía así con nuestros primeros ancestros, como muestra una nueva
investigación, la cual revela la espectacular capacidad para romper a
mordiscos cáscaras muy duras de frutos secos que poseían nuestros
ancestros dos millones y medio de años atrás. Esta capacidad les
permitía alterar su dieta para adaptarse a los cambios en las fuentes de
alimentos de su entorno.
Menéame
Mark Spencer y Caitlin Schrein, ambos de la Universidad del Estado de
Arizona, son parte del equipo internacional de investigadores que
planificó y llevó a cabo el estudio sobre la biomecánica de la
alimentación y la ecología dietética de los Australopithecus africanus.
Utilizando modelos informáticos vanguardistas y tecnología de simulación
igualmente avanzada (del mismo tipo que la usada por los ingenieros para
simular como un automóvil reacciona ante las fuerzas de la colisión),
los científicos construyeron un modelo virtual del cráneo del A.
africanus y pudieron ver cómo funcionaban las mandíbulas y qué fuerzas
eran capaces de ejercer.
Los resultados dejan claro cómo las mandíbulas estaban diseñadas para
resistir las pesadas cargas estructurales inherentes a la acción de
resquebrajar las cáscaras duras.
Lo comprobado por este nuevo estudio se suma así al conjunto creciente
de evidencias y conclusiones que indican que las especializaciones
faciales de los primeros humanos son adaptaciones vinculadas a la
capacidad de adoptar ciertas dietas específicas.
El agrandamiento de los premolares, el robusto esmalte dental y las
evidencias ahora obtenidas de la gran fuerza que ciertas mandíbulas eran
capaces de ejercer, hace pensar que el tamaño de los objetos
fracturables a mordiscos era mayor que el de los pequeños frutos secos y
semillas aceptados exclusivamente hasta ahora por muchos científicos.
Recurrir a frutos secos y semillas duras a modo de alimentos para casos
de emergencia fue una estrategia importante para sobrevivir durante un
periodo de cambios climáticos y escasez de alimentos de fácil acceso. La
nueva investigación muestra que los primeros ancestros humanos, que
todavía no habían aprendido a fabricar herramientas de piedra, resolvían
con sus mandíbulas problemas de acceso a alimentos que los humanos de la
Edad de Piedra resolverían con herramientas.
Información adicional en:
|