PASCAL
LANGUIRAND,
UN ESTILO
MUSICAL POLIFACETICO
Por: Manuel Montes & Jorge Munnshe
Pascal Languirand es uno de los más importantes compositores de vanguardia en Canadá. Desde su primer álbum, en 1978, ha demostrado su imaginación en todo lo que ha hecho, desde bandas sonoras para televisión, hasta música electrónica bailable como es el caso de su canción Living on Video (Trans-X), de la que se vendieron más de dos millones de copias, y que obtuvo un disco de platino en México.
A través de largos encuentros que hemos tenido con él en diversas ocasiones durante los últimos años, hemos podido conocer sus puntos de vista sobre la vanguardia musical, así como sus inquietudes artísticas más importantes.
Living on Video se ha convertido en un clásico del Tecno, y una de las muestras más vanguardistas de música bailable de los años ochenta. Pero Pascal no está vinculado exclusivamente al Tecno. Desde su primer álbum en 1978, ha explorado diversos campos dentro de las músicas alternativas, siguiendo su particular sendero musical que a fines de los setenta le llevó hacia la Música Cósmica. Componer Living On Video y fundar el grupo Trans-X respondió a una diversión momentánea, a una incursión esporádica fuera de su línea artística habitual. La travesura le abrió la puerta de la fama y del dinero. Era muy fácil que Pascal desestimase sus ideas artísticas más personales y se dejara seducir por el ascenso a Estrella del Pop, tentación a la que han sucumbido tantos artistas antaño radicalmente alternativos y hoy anodinamente comerciales. Por supuesto, el haberse convertido en un Gran Negocio para el engranaje discográfico, le hizo sufrir fuertes presiones para que no abandonase el camino que había empezado. "Querían imponerme lo que tenía que componer. No es extraño, ya que mucha gente tiene a costa mía casas y coches de lujo. Todos estos intermediarios discográficos querían seguir explotando mi éxito para su provecho. Por eso salí del juego. Yo quería seguir mi carrera, no convertirme en una marioneta de las discográficas".
Preferir la libertad artística al éxito comercial es un rasgo que magnifica la figura de todo artista. Así que en el caso de Pascal Languirand nadie podrá acusarle de que compone influenciado por los requerimientos comerciales.
Hijo de padres canadienses, nació el año 1955 en París. Aunque se crió en Canadá, viajaba con frecuencia a México. El motivo era que acompañaba a su padre, escritor, quien se sentía fascinado por el país y encontraba allí la inspiración necesaria para escribir sus libros. Pascal nos contó que a causa de ello, a los cuatro años de edad ya había aprendido algo de español jugando con niños mexicanos de su edad.
A los 18 años empezó su interés por componer música. A causa de ello, se puso a estudiar música electrónica y comunicaciones en la McGuill University, así como algo de cinematografía en la Concordia University. "Me gustaba sobre todo experimentar. Solía hacerlo con cintas magnetofónicas, especialmente con mi grabadora de 4 pistas, con la guitarra eléctrica, algo así como Pink Floyd, jugando con el eco, los bajos. Por tanto, me basaba en la manipulación de los sonidos. Mis estudios en la universidad, en realidad, no me sirvieron de nada. Prefería experimentar por mi cuenta".
En 1978 se editó su primer álbum, Minos. Según él, no le fue difícil lograr que se publicase. Atribuye esa facilidad a que entonces la música electrónica era algo nuevo, que llamaba mucho la atención, por lo que eran muy frecuentes sus actuaciones televisivas y que le hicieran entrevistas sobre su peculiar estilo musical.
Con su segundo álbum, De Harmonia Universalia, en 1980, forjó uno de los más típicos signos de identidad de su música: la abolición de las fronteras del tiempo. Fusionó con asombrosa compenetración cantos gregorianos y melodías cósmicas de sintetizadores, creando un estilo que ha sido definido como el Nuevo Romanticismo Clásico. El definió su concepto musical como "Música de una civilización naciente".
De su posterior labor componiendo bandas sonoras, se publicó el álbum Vivre Ici Maintenant que recoge su música para una serie de televisión canadiense.
Después de su etapa como Trans-X, Pascal permaneció varios años en silencio, durante los cuales estuvo viviendo en Estados Unidos. Tras ello, volvió a aparecer en la escena pública con su álbum Gregorian Waves, la profecía del advenimiento de un Nuevo Renacimiento, a través del culto a la Diosa Tierra, un trabajo vanguardista y a la vez clásico, envuelto de calidez y misticismo. En este álbum incorporó textos en latín escritos por él.
Ishtar apareció en 1993. Casi al mismo tiempo, se publicó Pascal Languirand, un CD recopilatorio que recoge canciones procedentes de sus dos primeros álbumes más una inédita. Poco después, Michel Huygen (Neuronium) colaboró con Languirand como productor del nuevo trabajo de éste y Henri Chalifour como Trans-X.
Hay que destacar que Pascal no se considera circunscrito a ninguna corriente musical determinada, ni hace distinción entre lo acústico y lo electrónico. No tiene reparo en admitir que utiliza ordenador, pero al mismo tiempo explota las posibilidades del sonido acústico, de las voces, y de las ideas expuestas en sus textos: "Los textos que a veces incluyo en mi música, son parte inseparable de la misma. Forman un todo. Jamás uniría una música y un texto que no encajasen. Es muy importante para mí que los textos tengan su lado poético y siempre quieran decir algo. Que no sean la típica letra intrascendente de relleno. De otro lado, me parece vital cantar en otros idiomas además del inglés. Es muy importante difundir la cultura de muchos países para así evitar estar inmersos en la cultura de unos pocos, la anglosajona. Por eso intento diversificar los idiomas que incorporo a mis temas. También me encanta explotar la diferente textura vocal de cada lengua".
Cuando le preguntamos acerca de su método para componer, nos respondió: "Para que se me ocurran ideas musicales debo tener algo dentro de mí mismo. Por el mero hecho de desear componer, no me surgen ideas. En cambio, cuando noto que tengo alguna idea, pueden ser necesarios apenas diez minutos para dejar casi lista una pieza. La melodía es un elemento muy importante en mi música. A consecuencia de esto, puedo, por ejemplo, componer con una sencilla guitarra acústica algo que grabaré con sintetizadores".
Considera que los artistas deberían reflejar lo que ocurre en la sociedad, que la música no tendría que ser sólo un arte sino también mostrar lo que ocurre alrededor. En este sentido, Pascal se manifiesta comprometido con su entorno.
Pascal Languirand y Michel Huygen se conocen desde hace unos quince años, y admiran mutuamente su trabajo. Sin embargo, no se han sentido influenciados el uno por el otro, como afirmaron al plantearles nosotros esa posibilidad.
El lado humano de Pascal Languirand no es en absoluto el que podría temerse de un músico que tiene un disco de platino, que vendió más de dos millones de copias de una canción, y que estuvo en las listas de los diez principales en diversas naciones europeas. Las veces que nos hemos reunido con él, nos hemos sentido como con un amigo con quien se charla de música, en vez de como periodistas entrevistando a una celebridad para escribir un artículo.